En el mundo del detailing, conocemos bien el uso de ceras y coatings, productos tecnológicamente avanzados que ofrecen una capa adicional de protección para conservar la pintura del vehículo. Sin embargo, con el tiempo, sus efectos tienden a disminuir.
Es aquí donde surgió la necesidad de una solución más duradera, y el Paint Protection Film (PPF) ha llegado para cubrir esa carencia. Para la industria automotriz, este producto se ha posicionado como “la mejor opción para proteger la pintura de los daños causados por pequeños impactos y arañazos diarios, manteniendo la apariencia original del coche como el día que salió del concesionario.”